miércoles, 10 de septiembre de 2014

Porno vs. realidad. ¿Fantasía o adicción?


Todos los chicos (o casi) vemos porno y nos hacemos pajillas. Sin embargo, ¿dónde está el límite? ¿Se puede llegar a un punto en que sólo nos pongamos cachondos viendo/pensando en porno? ¿Cómo puede afectar eso a nuestra vida sexual con otras personas? Pues la cuestión es que la adicción al porno existe... Ahora, para ti, ¿es una simple fantasía o se ha convertido en adicción?

El caso es que no hablo de esto por propia experiencia.... ha salido en un par de conversaciones últimamente y me parece un buen tema para tratarlo aquí. En uno de los casos me comentaban que un chico veía tanto porno que luego le costaba ponerse a tono con su novio... como que se había acostumbrado a cuerpos 10 y luego la realidad dejaba de motivarle. El otro directamente me decía que a veces le costaba acabar si no se imaginaba porno cuando estaba con su chico (el cual por lo visto no está nada mal precisamente).

A mí en concreto es algo que nunca me ha afectado. Sí que es cierto que me masturbo bastante a menudo (viendo porno, claro)... pero diferencio mucho entre estar a solas y estar con alguien más. Cuando estoy yo solo es más por relajación, aburrimiento, rutina... y es algo bastante cotidiano (como limpiarse los dientes) y visual. Cuando estoy con alguien lo veo como un momento bastante especial e íntimo y me centro más en las sensaciones: tactos, olores (y no necesariamente a sobaquillo, cerda, que todos tenemos un olor personal muy concreto), acercamientos, caras, actitudes... Es que incluso cuando he quedado con el típico que para entrar en calor te pone una porno, me ha dado bastante igual o incluso un poco de rabia (que estoy aquí y no en la tele, maricón).

Como que para mí son dos experiencias completamente diferentes... La masturbación y el porno son definitivamente sustitutos del sexo para mí.

Pero está visto que hay gente que, aunque quizás no se lo plantee, que es adicta al porno. Yo creo que el límite, más que la cantidad de veces que uno se masturba (que por lo menos para mí no tiene nada que ver), debería ser el momento es que le cuesta mantener una erección o eyacular si no es con porno (aunque sea en su cabeza). Lo cual me recuerda al típico chiste hetero donde uno está pensando en Scarlett Johansson y la otra en Pierce Brosnan... Pero está claro que en todas partes cuecen habas. Un verdadero problema de pareja me parece, la verdad...

Y a ti, ¿te ha llegado a afectar el porno hasta este punto alguna vez? ¿Has estado con alguien que fuera adicto al porno? ¿Experiencias?

6 comentarios:

  1. Estoy totalmente de acuerdo contigo. Una cosa son las pajas porno mediante, y otra muy distinta el sexo a dúo (o con cuantos sean xD)

    En tumblr me "enfrento" a porno y chulazos continuamente, pero ya casi ni me afecta. Y lo normal es que me masturbe por decisión propia y no de mi rabo (aunque no siempre es así, que uno no es de piedra xD).

    ¿Ellas piensan en Pierce Brosnan? o_O

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Yo he pensado lo mismo... ¿Pierce Brosnan? Chico, ¿Qué eres? ¿Una ama de casa de los 80?

      Eliminar
  2. Uy, no sabría muy bien que decir... lo de fantasía, más bien no. Las fantasías las tengo con gente que conozco y/o me encuentro. Un chulazo (o un número n de ellos) en la pantalla me puede gustar más o menos, pero no me despierta ninguna fantasía. Adicción tampoco, porque no tengo una necesidad de verlo. No se... alguna cosa me distrae, pero no creo que sea imprescindible en mi vida.

    ResponderEliminar
  3. muy de acuerdo. el porno mientras no haya algo de verdad sirve, pero cuando uno esta en la faena con alguien es una distraccion mas bien molesta. ademas crea muchas expectativas e ideas poco realistas. creo que ya lo habia comentado en otra entrada, pero lo que se ve bien el pantalla no es para nada lo mismo que lo que se siente bien. los actores porno ponen cara de placer y dan dritos de alegria cuando se los follan haciendo el pinopuente y con las articulaciones desplegadas en angulos imposibles al tiempo que los taladran a mil empujones por minuto pero es porque les pagan y no porque lo disfruten de verdad. el sexo que de verdad se disfruta tiene que ver con la espontaneidad, el escuchar el propio cuerpo y el del otro y conocerlo y no en darle como si estuvieras tratando de demolerlo. o si son pasivos quedandose quietos en la posicion que los pongan y haciendo chillidos "sensuales" a grito pelado ("o yessss o yessss o maigá) hay muchos por ahi que cogen esas idea del porno y follan terriblemente. en cuanto a la adiccion creo que se cruza la linea cuando prefieres quedarte haciendote pajas con el interné y descuidas las cosas importantes, como por ej la persona de carne y hueso que tienes al lado

    ResponderEliminar
  4. Yo veo porno pero cuando estoy solito. Si estoy con alguien, eso ya es más que suficiente. Que una cosa es la fantasía, y otra la realidad.

    ResponderEliminar
  5. Amores míos:

    Estoy feliz de ser Gay, soy una persona adulta.

    Esta condición la sentí a temprana edad. Cuando estaba enfermo y tenía fiebre me introducían el termómetro en el ano para ver la temperatura del cuerpo., y me gustaba, no sabía bien qué sentía, pero me era agradable.

    Algunas veces, cuando hacía mis necesidades en el baño y me pasaban el papel para limpiarme, también sentía un cosquilleo que no me explicaba.

    Estas sensaciones que se repetían una y otra vez, me llevaron con el tiempo a introducirme mi dedo, la primera vez solo rocé la parte exterior del ano varias veces y me di cuenta que era muy rico. Me gusto e insistí en varias oportunidades.

    Las primeras veces solo la yema de mi dedo entraba un poco, seguí probando y probando, hasta que logré introducirlo hasta la primera falange.

    Fue un momento en el que sentí miedo y alegría, ... no sabía que hacer, ... y lo retiré rápidamente.

    Volví a probar, pero ya con más confianza hice con él varias cosas, como meterlo y sacarlo, darlo vuelta alrededor de los bordes, tratar de llegar lo más adentro posible, etc.

    Así continué mi experiencia por mucho tiempo. Solo en mis momentos íntimos recurría y recurría a esta práctica. Aún no sabía lo que era un homosexual, ni menos que les gustaba hacer algo similar.

    Quisiera continuar mi historia, pero a lo mejor nadie me lee o no le interesa el tema.

    Si quieren saber el resto, escríbanme a mi correo franzhern@yahoo.com y nos ponemos de acuerdo o nos juntamos para conversar o intercambiar experiencias. Esto no es "absolutamente necesario" solo si alguno lo desea y después de adquirir cierto grado de confianza.

    Los dejo, un beso muy grande a todos,

    FranzJo
    franzhern@yahoo.com

    ResponderEliminar

¡Maricón el último!