Cuentos de terror post-Halloween

Octubre parecía que venía a ser el mes del terror por aquello de Halloween, las ánimas y los videoclips que profanaban canciones de Massiel... pero no. Si hay que quedarse blancos del pánico, yo me esperaría a ver lo que pasa a partir del próximo día 20.

Ese día se celebran elecciones en España y todo indica que ganará el partido que lleva casi 8 años intentando prohibir el matrimonio gay. Todo porque, ya sabes: el matrimonio es para ellos la unión entre un hombre y una mujer y lo nuestro debería llamarse de otra manera. Es decir... perdería su aroma la rosa si la llamamos de otra forma? Cantaría mejor Tamara la mala si la llamamos Yulema? Probablemente no, pero pensar que los gays y lesbianas no somos lo bastante buenos como para poder casarnos es otra cosa. El nombre es muy importante.

Como si yo ahora empiezo a llamar criadas, matronas o limpiadoras a las mujeres por el hecho de ser mujeres. O esclavos a las personas de color por ser de color. Rebajar a unos en favor de otros es discriminación. Y si, en el muy mejor de los casos, imagínate que ahora te dicen que a lo nuestro en vez de matrimonio se le tiene que llamar chonchijander y que no te casas, te chonchijas, sería decir que los gays y lesbianas somos inferiores, o no somos iguales en definitiva, y por tanto debemos llamar a nuestra unión de otra manera.

Pero, claro, algunos piensan que si se elimina el matrimonio gay, se armaría la de Björk y la gente saldría a la calle en manada para manifestarse... Yo me pregunto si no pasaría como con el 15M, que habría cargas policiales indiscriminadas, luego los medios dirían lo que el gobierno les mandara (o no te acuerdas también de lo que era TVE hace nada?) y de aquí a dos años ya estamos otra vez perseguidos por vagos y maleantes.

Y Ay! Qué exagerado eres, Eric! Es que te pones en lo peor! Pues sí, me pongo en lo peor, pero es que de un partido político que está claro que hace con el dinero público lo que le da la gana (desde traer al Papa y pagarle la visita a todos sus papafans a hacer ciudades de las ciencias que solo sirven para hacer anuncios de coches), que con decir yo no he sido lo tiene todo resuelto (o mira qué pasó con los trajes valencianos) y que tiene gays y lesbianas en el poder que nunca han movido un dedo por nuestra/su igualdad (y esto ya me parece demasiado evidente como para explicalo), ya me lo creo todo.

Y aun así, ganarán, seguirán haciendo con nosotros lo que les da la gana y aun habrá gente (LGTB incluida) que les dé las gracias. 

Nubes oscuras se ciernen sobre Oz, querido Totó, que yo ya no sé si empezar a buscar tacones para manifestar mi libertad a tener la sexualidad que me dé la gana o directamente go west (sea donde fuere ese west).