7 Terrores Gays

¿Acaso los gays no sentimos dolor cuando nos golpean? ¿No sangramos cuando nos pinchan como todo el mundo? ¿No sufrimos un terror inconcebible si nos imaginamos a Alaska y Mario haciendo cochinadas en la cama? Pues por supuesto que sí, como cualquier otro ser humano... pero también es cierto que tenemos nuestros miedos particulares. Hace tiempo hablaba de imágenes que me hicieron más gay... y, aunque muchas de aquellas cabrían perfectamente en esta entrada, ahora, siguiendo un poco la temática Halloween que llevamos, veremos 7 de los terrores gays más espeluznantes:

1. Enamorarse de un hetero

Pocas cosas me parecen más de pesadilla que enamorarse de un chico hetero... Porque, claro, con ese rollo tan masculino, con ese 'estoy bueno pero no te tiro los trastos' o el hecho de que sea un completo imposible, para algunos (o más bien muchos) es difícil resistirse. Nada motiva tanto como que nos lo pongan difícil, ¿verdad? Pues no, queridos, no, hay que ser fuertes, tener dos dedos de frente y saber que con un hetero como mucho una mamadita rápida y se acabó. Para enamorarse nada como los maricones de toda la vida... o los bi, clarostá.

2. Que te saquen del armario

Yo es que, como hace más de una década que salí del armario, ya lo tengo muy asumido todo este asunto, pero lo cierto es que cuando estás ahí dentro no hay terror mayor que el que alguien pudiera enterarse... Pues puedo decirte que incluso he conocido casos de novios despechados que se han presentado en casa de los padres del otro para hablarles sobre su tierno hijito (y que las mujeres, como mucho, divinas y en la gran pantalla). Toda una burrada e incluso un conjuro imperdonable gay, pero mira... para las pesadillas de esta noche de algunos.

3. Que dos chicos que te gustan se lien entre sí

Esto seguro que a más de uno le ha pasado también alguna vez... lo de salir por el ambiente, por ejemplo, pasarte la noche pensando si acercarte a hablar con el de la camiseta roja o el de cuadros y al cabo del rato ver cómo se enrollan entre ellos, ahí, en mitad de la pista, sin pudor ni consideración alguna por tus sentimientos... O cuando te enteras de que dos medio-exnovios están saliendo juntos... Aunque ahí por lo menos puedes decir que has tenido tu oportunidad... Aun así, nada agradable, sin duda.

4. Enamorarte de un recién desarmarizado

Así de pronto cabría pensar que un gay recién desarmarizado es como cualquier otro... y puede ser así, evidentemente, pero también hay muchas posibilidades de que le entre el ansia de la juventud (aunque sea psicológicamente hablando) y le den ganas de tirarse a media ciudad. Por supuesto que eso puede pasarle también a gays que dejaron muy atrás el armario, pero diría yo que las posibilidades aumentan cuanto más reciente es el tema... como que dan ganas de salir a explorar. Para mí, los que hayan pasado la etapa de puterío, por favor.

5. Que una mujer intente propasarse contigo

Puedes pensar que esto es una tontería y que estas cosas no pasan o no son para tanto o nosequé... pero hoy debo confesar que una vez a mí, hace muchos años, me pasó. Y no es nada agradable. Había salido del armario hacía poco, estábamos en casa de ella, una amiga, solos, haciendo cualquier tontería... tiró a besarme y le hice la cobra... pero aun así estuvo como 10 minutos persiguiéndome por toda la habitación e intentando convencerme. Al final se cansó (o vió que no había manera) y dijo que era broma, pero vaya... mal rollo no, ¡horror!

6. Quedar como el último soltero entre todos tus amigos

Esto en realidad puede pasarle a cualquiera más allá de su orientación sexual... pero como a los gays parece que nos cuesta un poco más hacer amigos gays, puede ser mucho más drama. Como que de golpe y porrazo te toca olvidarte de salir de fiesta, cuesta el doble tomar un simple café con ellos... si no es que desaparecen por arte de magia. Y es que el amor es muy bonito pero a muchos les hace olvidarse de que tienen amigos también. Por no hablar de lo que puedas comerte la cabeza por ser el único que no ha conseguido novio, claro... Una fiesta, vamos.

7. Que cierren el blog 'A ti ¿qué te gusta?'

Pues sí, chico, porque somos así de maravillosos, porque nosotros lo valemos y porque  no se me ocurría un séptimo terror gay para acabar la lista...

A ti, ¿se te ocurren más terrores gays? ¿Qué es lo que te haría que te cagases patas p'abajo? Sobre el tema este, claro... zombies, arañas, payasos y monjas a parte, quiero decir. ¿Cual es tu terror particular?