Bodas gays

Frase de la semana:
Nunca espié a Bisbal dentro de un armario.
Básicamente porque no existe armario donde quepa mi culo (La Chenoa)

Este post es un encargo que me hace Eric. Últimamente le estoy dando vueltas a cómo querría que fuera mi boda, si es que me caso (nunca se sabe). Y pensando pensando, si alguien no tiene curro y le apetece montar algo único, una empresa que organice bodas gays sería la caña. Se puede empezar al estilo de Emmet en Queer as Folk, en casa cocinando y a base de teléfono y página web, y cuando la gente vea lo buena que es la empresa ya montar algo más profesional. Y una que tiene vocación de ayuda, os va a dar unos consejillos para los que quieran iniciarse en tan bonito evento, pensando en mi futurible boda poniendo un ejemplo.


La despedida de solteros. Este tipo de festejos, si quieres que funcionen bien, nunca deben ser organizados en conjunto, si no la boda no se celebra ni de coña. Es mejor enviar uno a Boston y otro a California, y elegir amigos que no se conozcan entre ellos, para que la rumorología no haga mucho efecto. De esta forma se puede tener una despedida en condiciones, con pollas de colores, chulazos dandote de beber, bandas con colores del arco iris, y ligoteo por la disco del lugar. Por supuesto los dos novios deben ligar con alguien, para que les suba un poco la autoestima y piensen que todavía podrían estar "en el mercao". Garantizarles a ambos completa confidencialidad de que el otro no se va a enterar de nada de lo que pase. Como lugares de viaje posibles, tenemos Benidorm, para quien le guste el tema cuarto oscuro y los boys, Valencia, para el que le guste mortificarse y no comerse un torrao el día de su despedida, o Chueca para el que quiera encontrarse con 17.000 despedidas de soltera y darse ánimos mutuos entre copa y copa.

La ceremonia. Aqui podemos hacer miles de variaciones, desde bodas estilo las Vegas,vestidas de Priscilla, hasta simulacros de bodas rancias católicas oficiadas por monseñora Kiwi Light. Apostaría por celebrar la ceremonia donde el banquete, con lo que no tienes que movilizar a todo el mundo de un lado a otro, a parte de tener libertad para arreglar el lugar como te salga del nabo. Una o más travestorras son necesarias para animar la velada. Dependiendo del repertorio musical debes elegir a una u otra. Y lo mejor es dejarse de horteradas de ceremonias pasteloides con discursitos de amor eterno y cosas varias, eso está hipervisto, y hay que ser modernas ( de mierda).

Las damas de honor. Tus queridos amigos no se van a quedar sin un papel crucial en la boda. Con mantilla negra (sin teñir , por favor, no queramos ser Carmina qepd) y vestido color rosa furcia o lo más chillón que se encuentre. Deben llevar condones que repartirán a la salida para que la gente lo lance sobre los novios. Todo el mundo sabe que los condones son símbolo de fertilidad.

Las arras y los anillos. Si se diera el caso de que alguno de los novios tuviera hijos, uno de ellos debería ser el portador del tesorito. Si no, tenemos la opción de algún primito o sobrino, si es que sus padres le han dejado ir a la boda. En la mía las arras las va a llevar un chulazo rollo Bel Ami, por aquello de la juventud y pubertad.

Padrinos y madrinas. Dejémonos de elecciones, los padres y las madres deben participar en la boda. TODOS, nada de sólo los padres o sólo las madres. Hay que darles un tranquimazín 500 previamente, para que no les dé el ataquito cuando vean como queda la ceremonia. En este caso sí que sería interesante que prepararan algún tipo de discurso, poniendo a caldo a toda la familia, como suelen hacer cuando vuelves a casa de tus padres de visita. Viva el buen rollo.

El banquete. Todo debe girar en torno al tema Polla. El menú podría ser: Sopa de nabos, rabo de toro, plátano frito con miel y mona de pascua ( con forma de polla, como la q nos trajo la suegra de mi hermano por Pascua). El lugar donde se haga el banquete debe tener al menos 3 tipos de baños: para nuestras necesidades, para las "rayantes" y para las que les va el cruising y el rollo Men at Play. Las canciones deben girar todas en torno a divas gay y en vez de bailar el vals, que queda fatal que lo bailen dos tíos, lo mejor es el "baile del pañuelo", de Leonardo Dantés.

El viaje de fin de novios. Después de celebrar semejante boda no hay nada mejor que un descansito. Para los que tengan el presupuesto ajustado, un tour por Europa, visitando las principales capitales y sus lugares de ambiente. Para los que quieran despilfarrar, lo ideal es ir a Las Vegas, y ver a Barbra Streisand en el que seguro que será su último concierto (otra vez). Ir a alguna isla paradisiaca tampoco está mal, aunq cuidado con el isleño de turno, que está siempre preparado para disparar con el rabo.

PD: Tom, te edito la foto que la tenía pensada ya y era imprescindible que el mundo conociera las rosas arcoiris, ok?